viernes, 29 de enero de 2016

DELINQUIRAS Y LO SABEMOS



Hace media década, la noticia de la creación de un nuevo escáner cerebral sacudía al mundo científico. Se hacía referencia a su capacidad de medir el estado mental presente y la personalidad de un sujeto a través de su actividad cerebral. 

Posteriormente, tras el incremento del conocimiento aportado por la medicina y neurociencia, sin dejar de hacer mención a la psicología y al avance de la programación informática y tecnología en general, el prototipo CRIME-Doc fue desarrollado hasta convertirse en un dispositivo que, junto a la incorporación de los datos procedentes del historial médico y psiquiátrico del sujeto, calcula la probabilidad de cometer delitos y de conducta antisocial en el momento del análisis. 

Estos datos son recogidos por un sistema que elabora un “coeficiente de criminalidad” determinado por los niveles de estrés y otras lecturas biológicas del ciudadano en cuestión, y podrá dar el visto bueno a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para tomar las acciones necesarias. 

¿La total prevención del delito?
 
Importantes figuras en la historia de la Criminología ya nos anticipaban este hecho. Por
ejemplo, según Quetelet (1796-1874) la sociedad contiene en sí misma los gérmenes de todos los delitos futuros y mediante un método adecuado, el delito puede predecirse al tratarse de un hecho normal, regular y constante, que se repite con periodicidad mecánica. Otros autores como Aubry y Lacassagne distinguían dos clases de factores criminógenos: predisponentes (herencia genética, desequilibrio nervioso, variaciones anatómicas, etc) y transmisores del contagio (educación, familia, presiones ambientales, etc). 

El avance de la ciencia ha hecho posible que en Japón se comience a utilizar este sistema para detectar y poner en tratamiento o neutralizar a los sujetos peligrosos. A pesar de tratarse de un método tan novedoso, goza de un gran éxito en el país.

Este determinismo fatalista nos lo encontramos en el distópico Japón del futuro que nos muestra la serie Psycho-Pass. Una serie de anime policíaca que nos hará reflexionar sobre derechos fundamentales, política criminal y antiguos postulados criminológicos. 

Dado que todos somos criminales en potencia, me alegro de que sea solo ciencia-ficción.





 

Samuel Jurado
Redactor en “Criminología de estar por casa”.
Administrador de “Elementos Criminales” y creador de “CRIMUNIR”.
Representante de Estudiantes y miembro de la UCT en la Universidad Internacional de la Rioja.
Contacto: elcriminologoelemental@gmail.com

2 comentarios:

  1. Excelente, muy recomendable. Sin duda todo un artículo elemental.

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  2. Excelente, muy recomendable. Sin duda todo un artículo elemental.

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